Científicos alemanes de la Universidad de Múnich han descubierto un sexto sentido en anfibios y peces que les permite 'tocar' objetos situados a su alrededor sin tener ningún contacto físico directo o 'ver' en la oscuridad.

El profesor Leo van Hermmen explica que el hombre con los cinco sentidos se pierde mucha de la información que le rodea, como por ejemplo luces infrarrojas, ondas electromagnéticas o ultrasonidos, y que la tecnología puede solventar.

Así, señala que muchos animales cuentan con algunos órganos sensoriales especiales, dentro de su sistema biológico. En este sentido, indica, por ejemplo, que un tipo de pez mexicano, el (Astyanax mexicanus) puede sentir cosas antes de tocarlas o percibir estructuras sin verlas, así como sortear obstáculos. Este pez vive habita en cuevas oscuras y sortea obstáculos sin verlos ni tocarlos gracias a un órgano que mide la distribución de la presión, perturbaciones y la velocidad del agua circundante, a través de los neuromastos, unos sensores situados en los laterales de este animal.

Este hallazgo podrá aplicarse en unos años gracias a la ingeniería biomimética a la robótica.